Agustín Casulo: Auto-Tune, sintes y pop

Kristel Latecki

El cuarto disco de Agustín Casulo lleva el nombre sugerente de Pop Champagne. Si fuera un pop con denominación de origen ese sería Uruguay, un país con prejuicios hacia el pop pero no al que se escucha en la radio. Contexto complicado pero fértil, donde a pesar de las adversidades están saliendo un montón de propuestas del género. Su nota de cata estaría definida por la frescura del mundo urbano y con notas ligeras de ritmos tropicales. Y como el Champagne es efervescente, pegadizo y festivo, como las canciones Adrenalina o Boogity; pero puede rápidamente irse hacia lo oscuro y decadente, como El Plan. “Son las ratitas y la bolsa de basura al lado de la limusina, digamos”, une Agustín al arte de tapa. 

“A mí me gusta decir: ‘sí, yo hago pop’. Con un sonido más urbano o más canción, pero esto es pop y chau. Es un lugar que me queda cómodo y me gusta”, afirma el músico. Acompañado por Santi Marrero como co-productor, e invitados como Eros White, Luis Angelero y Zeballos, con este disco consolida ese sonido que llevó su búsqueda y experimentación, pero al que llegó con una buena cosecha.

Con Agustín conversamos sobre su primer disco y las razones por las cuales lo linkea a Pop Champagne, las colaboraciones, la astrología y su presentación el 4 de noviembre en Magnolio Sala

Quiero hacer como una mini trayectoria hacia este disco. Laboratorio, tu primer disco es de 2015, ¿Qué fue pasando en esta etapa y cómo fuiste buscando tu propio sonido?
Algo que estuve re pensando con ese disco y con la salida de este –que está como re movilizante y todo–, es que antes la música estaba en función de las cosas que me pasaban en mi vida, por ejemplo. Ese disco lo hice porque estaba aprendiendo a producir. Primero empecé grabando covers, y después arranqué a componer. En ese momento me gustó y saqué el disco. 

¿En este momento te sentías más productor que artista solista por así decirlo?
No, es que no era nada. Estaba como descubriendo. En 2014 me mudé de Minas a Montevideo, yo viví toda la vida ahí, mi familia es de allá. Iba a estudiar Medicina y arranqué una carrera de Ingeniería Audiovisual. Ahí conocí gente de mi edad que estaba haciendo música, cosa que en Minas me pasaba muy poco, éramos mis tres amigos y yo. Entonces, empecé a componer y a aprender a producir, y una cosa también fue alimentando a la otra.

¿Cómo fuiste evolucionando y cómo fuiste llegando al sonido de ahora, porque cambió un montón?
Arranqué a ser más consciente de lo que quería hacer. Y fui agarrando las herramientas como para poder llevar a cabo ese sonido. Yo escucho más o menos la misma música desde esa época hasta ahora, como que eso no cambió. Pero siento que ahora tengo las herramientas de productor y también las herramientas del palo más artístico. Entonces, mi primer disco podría haber sido perfectamente este. Y es el primer disco en el que digo "ta, me re gusta cómo suena". 

A la hora de empezar a hacer las canciones para este disco quise tender un puente entre lo que fue el Agustín del 2015 y el Agustín que ahora. Yo en el camino trabajé con muchísimos raperos y raperas, y esa frescura, ese sonido hoy me re gusta. Entonces, para este disco quise hacer canciones que suenen urbanas pero que mantengan la esencia de la canción. Un poco vengo de ahí, yo me crié con rock nacional, con La Vela, Trotsky, El Cuarteto, No Te Va Gustar. Y quería respetar un poco eso de la canción pop, dándole algo más correspondiente a mi generación también.

Quiero meterme precisamente en el mundo pop. ¿Por qué decidiste entrar por esa por esa veta y defenderlo, como decís en El Plan?
Sinceramente me gusta el sonido. Yo toqué la guitarra mucho tiempo, y descubrir los sintes me permitió salir de la guitarra. Quise sacarme a mí del sonido tradicional de Uruguay. Que si bien me encanta, en esta propuesta quise salir un poco. Y los sintetizadores fueron la herramienta que me permitió hacer eso. Géneros como el hip hop y el pop siento que van por ahí. Y me gusta más cantar que rapear (Risas).

¿Cuál sería la primera canción que vos dijiste: "acá tengo algo que es mío"?
Yo creo que fue con Autotune, vinito y fiesta, que fue mi primera colaboración con Zeballos. Agus ahí estaba re creciendo, había sacado recién su primer disco. Él ya tenía un público formado y dije: “bo, la tengo que romper” (Risas). Fue la presión total. Estuve laburando muchísimo el tema, el beat, los cortes y mi parte. Y mucha gente me conoció con ese estilo. Yo ya venía haciendo eso, más de mezclar partes cantadas con Auto-Tune con un poco de rap. Había ya tenido un intento pero la idea nunca había quedado muy sólida. Con ese tema fue como “ahora sí, es por acá”. Todo empezó a cerrar, ahí me enamoré del rap y de colaborar también. Porque la magia que pasó en ese momento la seguí buscando por otros lados. Y me nutrí pila de juntarme con mucha gente de todos los palos. Gente del rap, del pop, gente con voces más soul. Eso al final te da tremendo bagaje y que a la hora de sentarte a componer tenés todo en la cabeza y terminás ordenándolo de alguna forma misteriosa. (Risas)

Entre colaboraciones y colaboraciones se armó un grupo de gente, pienso además de Zeballos en LU, BONI, que laburan mucho juntos, armando un camino también si se quiere ¿No?
Tal cual. Justo con Lucas desde el año pasado veníamos hablando, dándole un cuerpo a eso. Y armamos un colectivo que le pusimos Industria Nacional, fue el nombre que nos representó. Se fue armando una red de gente con la idea de hacer crecer esto. Lograr realmente una industria donde todos podamos vivir y que sea redituable. Ese es el sueño, ¿no? Estamos también con la mentalidad de que esto trascienda al estudio de grabación y los equipos de trabajo, para que esto sea un festival por ejemplo, algún día.

Hablemos del Auto-Tune. ¿Cómo le entraste y cómo fuiste explorando la herramienta?
Fue en mi segundo disco que quise probar con cositas más trap o rap, o hacer temas más rock que tuvieran una bajada más electrónica. Y fue después de escuchar dos discos de Juan Ingaramo, Pop Nacional y Músico. El loco tiene unas baladitas que son solo guitarra y un Tune todo dulce que te acaricia el oído, que decís: “¡Dios, quiero sonar así!”. Tiene un tema que se llama Horóscopo que es espectacular. A partir de ese disco quise ir un poco por ahí, pero estaba reacio a abandonar la tradición más rockera de mi primer disco. Hay temas que son tipo rock, guitarra eléctrica, tipo Coldplay, Cerati y con el Tune a morir. Pero después empecé a tener más conciencia de cómo usarlo. Y los temas más rapeados me permitieron hacer eso. Pero, ¿por qué meti eso? Creo que fue buscando un poco esa estética juanigaramesca.

Y tiene muchos detractores. Hay mucha gente que le tiene ira. 
Por lo menos para mí en el Tune encontré una herramienta como para no quedarme con lo primero que pasaba. Es una herramienta más de exploración. Ahora voy a clases de canto y todo, pero en ese principio si no cantaba con Tune no me iban a querer escuchar (Risas). Así que más vale que me lo acepten. Porque realmente no cantaba bien. Hoy en día estoy yendo a clases de canto, tratando de mejorar, descubriendo otras cosas de mi voz. Y se me abrió un mundo maravilloso de cosas que puedo hacer sin el Tune. 

¿Por qué elegiste a Santi o cómo se incorporó digamos a este a este grupo?
A mí obviamente me re gustan sus trabajos como productor y como tecladista. Creo que tiene una visión del pop y de los sintes re clara acá en Uruguay. Es un capo y muy fino con el sonido. Y yo soy más de hacer, me das la idea y hago que suceda. Pero me gusta que haya gente que se encargue de hacer que eso quede fino fino.

Lo que hizo fue producir dos temas, pero a los otros seis los fue escuchando y me iba tirando piques. Me sugería grabar una guitarra, o darle otra intención a la voz. También amplió pila de sonidos, intentando que las cosas no solo suenen bien sino que suenen diferente. Que escuches, por ejemplo, un shaker y que no sea el mismo que te bajás de plugs y que suena en todos lados. Eso todo unido siento que le da al disco una densidad aparte que te envuelve. Y que lo podés escuchar una vez sola, pero que la escucha no termina ahí. Podés ponerte unos buenos auriculares y encontrar cosas. Y también genera un interés que me gustaría que mi música genere. Al Agustín productor le gusta eso. Me interesaría que mi música interese realmente, o sea no solamente para bailar sino que también para escuchar.

Tenés un tema que es Luna en Acuario y otro Sol en Capricornio. ¿Son tus signos? ¿Te interesa la astrología?
Tengo una amiga que está re metida en el tema, y lo vi como una linda herramienta de autoconocimiento. Me gustó y agarré ese viaje. No conozco nada, soy un atrevido, pero leí un poco acerca de los distintos tipos de Luna y ascendentes. Una vuelta estaba haciendo una canción y calzó. Según tengo entendido, tu signo Sol es como lo que sos, el ascendente es cómo te mostrás o cómo te ve la gente, y la Luna son las emociones. Y muchas veces se dan cruces muy fuertes. Yo por ejemplo soy Capricornio con ascendente en Capricornio y Luna en Acuario. Entonces soy re trasparente, me muestro como soy. Y quise representar esos choques. Por eso Luna en Acuario es re meloso, re para arriba, el ritmo es hasta medio de cumbia del interior con ese acordeón. Y después aparece un trap re necio, que iba a tener letra pero no me gustó mucho cómo quedó rapeado. Y para que choque más preferí hacer un corte abrupto y quede instrumental.

En Luna en Acuario hay algo de ese tema que me hizo acordar a Llorando en la Limo de C. Tangana.
Síiii. Re. Como en El Madrileño, yo quería lograr una canción que tuviera un poco de raíz, y sonidos como el del principio de Sol en Capricornio que es casi un sample calcado de Strawberry Fields Forever. La bajada de acordes no es la misma pero es el mismo sonido. Y me gustó usar eso de referencia pero que se vaya transformando, y pase por lugares reconocibles. 

Mucha gente lo escuchó y me dijo: “volviste a ser Chano” (Risas). Y sí, la temática es como es tipo de chulo triste ¿viste? Sí, soy el mejor pero te extraño. Creo que es mi tema favorito del disco. Siento que nunca había llegado a ese nivel. No sé si es por instrumental o por qué fue, pero quedé muy contento.

Y además eso, es como que tiene ese sonido muy particular, sumando ese ritmo de cumbia.
Bueno, voy a confesar algo: para este tema quería hacerlo con un cantante de cumbia y no sucedió. Pero para una versión en vivo va a pasar. No voy a decir quién es para no quemarlo. Pero ojalá salga para alguna versión en vivo, sería increíble.

Boogity fue el primer corte y fue con Zeballos. Él tenía que estar, ¿no?
Y sí, él ha sido realmente una parte muy importante en mi carrera y hasta de mi vida, te diría. Él entró en mi vida en un momento que me quedaban unas materias de la carrera y con la música realmente no pasaba nada. Y ahí se empezó a gestar el plan, ¿viste? Lo que pasa en el estudio con él es un medio mágico, y me dio una esperanza re fuerte. Realmente me regaló una motivación hermosa. Además de obviamente exposición y que me conozca mucha gente gracias a él, que es una realidad. Estaré eternamente agradecido y me gusta que en los pasitos que yo doy él esté. Porque realmente le tengo un aprecio enorme a nivel artístico y a nivel personal.

Ese tema lo hice y fue claro que tenía que estar Agus. Se partió la letra, el estribillo lo hizo él, clavó la toma en 10 minutos. ¡Qué maldito! Hasta te enoja. ¡No puede ser tan bueno! Y en la base quise hacer un Agustin Casulo type beat. Hay un tema de Agus que se llama Bailalo Lento, que le da nombre al disco. Ese beat lo hice yo y quise hacer algo así, más para bailar, para arriba.

Se viene pronto la presentación, me imagino que todo está en pañales todavía ¿No?
Para un Capricornio no (Risas). O sea sí pero no ya hay un calendario. El disco se va a presentar el 4 de noviembre en Magnolio Sala, y tenemos ganas de darle al disco una presentación linda, cuidando muchas cosas. Vamos a hacer tres, baterista, tecladista, y yo voy a tocar un poco más la guitarra que antes. En este camino de volver un poco más a la canción me lleva a reencontrarme con la guitarra como instrumento para el vivo, y me gusta. Yo estoy re disfrutando. Y van a haber muchos invitados, como caracteriza mi show, que es algo que creo que lo hace re dinámico, re divertido. Hacerlo y no invitar gente sería un poco negar al proyecto, que fue re colaborativo.