Lucía Severino le canta a su Presente Continuo

Foto: Leonardo Maine y Nicolás Soto Díaz

Foto: Leonardo Maine y Nicolás Soto Díaz

Además de celebrar sus 10 años en los escenarios, este domingo Lucía Severino presenta en vivo su segundo disco, Presente continuo, un trabajo que dedica a relatar -y también criticar- situaciones y escenas de la vida actual, con la simpleza de la voz hablada. Como en su primer lanzamiento, está acompañada por su banda Tránsito, que se dedica a recorrer una gran variedad de géneros y musicalidades, sin trancarse nunca en un embotellamiento.

Sobre este disco, sus canciones y su interpretación hablamos con Lucía.

 

De cara a empezar a componer este disco, ¿qué sentías que querías decir o dejar plasmado en las letras?
No sé si hay una intención a priori en la composición. Las canciones van apareciendo individualmente y después hay una idea de conjunto que aparece, y algunas entran y otras no. Lo que sí quise fue plantarme en este momento, en cuanto a mí y a lo que me rodea, y expresar emociones que tienen que ver con esa permeabilidad que tenemos. Es difícil que me ponga a escribir sobre alguna cosa en particular, surgen en mí pensamientos, se materializan en las palabras de forma espontánea y luego la mayoría de las veces las trabajo, algunas más otras menos, pero están un tiempo en mí hasta poder mostrarlas, hasta encontrar la forma de salir afuera. Siempre pretendo que las letras puedan ser tomadas por quien las escucha, trato de plantear el pensamiento de forma abierta. 
Lo que apareció sí fue el nombre del disco, sin dudarlo. Creo que ahí está lo que une a todas las canciones. De algún modo, todas las letras de este disco entran en ese gran concepto de “presente continuo”, aunque hayan sido escritas en diferentes momentos tienen que ver con las sensaciones que vivo hoy. 

Me llamó la atención la frase de Estamos como queremos: “mirar atrás no es el pasado es entender lo nuevo”. En este país se vive reviviendo el pasado, pero acá decís todo lo contrario. Además también hay otro aspecto temporal con el título del disco, Presente continuo. ¿Es vivir el presente lo que un poco celebrás en este tema y en el disco?
Sí, creo que estar en el presente es la única opción, aunque no necesariamente es solo ver aquí y ahora sino asumir lo que ya pasó e integrarlo, el pasado, el “mirar atrás” sin una actitud nostálgica, sino como parte del presente. Algo así.  
El tema Estamos como queremos es un poco el despliegue del nombre del disco. Luego en este presente las sensaciones y emociones son muchas: el choque con la realidad, lo que impacta, las cuestiones personales y emociones en el contexto y las circunstancias sociales, personales, familiares, etc. Muchas de las canciones refieren a aspectos temporales, el vivir el tiempo es una constante en las letras y en la musicalidad del disco.

Utilizás el rap como modo de interpretación en varias de las canciones. ¿Cómo es tu relación con el género? ¿Es una herramienta más para expresarte?
Sí, es una herramienta expresiva que me gusta mucho, la palabra hablada y cantada complementándose. Me fascina musicalmente la cadencia de las palabras en bases musicales sólidas, lo rítmico, me parece un genero muy abierto a lo sonoro, a la incorporación del paisaje, surge de situaciones cotidianas, logra ser un medio para decir muy natural y dinámico. Yo escribo mucho y me interesa mucho lo rítmico en la palabra y en la música en general. 
Tomo del género esas cosas que me llaman la atención, las mezclo con otras músicas, cuestiones melódicas y armónicas que tienen que ver con aspectos culturales de mi espacio y de lo que soy, y obtengo una mezcla. 

El disco atraviesa una enorme variedad de géneros musicales, ¿eso tiene que ver con diferentes “ropas” que pide tener la canción?
Sí, las canciones mandan, piden determinadas cosas, yo trato de darme la libertad de dejar que aparezcan sin llevarlas a otra forma en el afán de lograr un producto más homogéneo. Pienso que tiene que ver con aceptar esa diversidad de momentos y ordenarlos de tal forma que compongan un todo.

Contame sobre el tema El arma de la fuerza. ¿Cómo se inclinaron hacia la cumbia en este caso? ¿Por qué lo eligieron como corte de difusión y cómo idearon el concepto del video?
Es un tema que se abrió camino en la banda y la cumbia surgió sin demasiado pensamiento al inicio, como que la letra la traía en potencia. Al principio era una melodía cantada con acordes de guitarra a contratiempo, podía disparar para varios lados. Luego el acordeón ya lo llevó más para ese lado y al incorporarse lo electrónico apareció más claramente la cumbia. Fuimos probando distintas cosas con la canción y tomó ese camino que aceptamos y trabajamos a nuestro modo. Siento que es esa la forma musical para decir lo que quiero con esta canción. Empezó a generar respuestas también en quienes la iban escuchando en vivo y eso fue alimentándola hasta ser grabada.

La idea del video surgió en charlas antes de pensar seriamente en realizarlo, como “qué bueno sería hacer tal y cual cosa”, lo fuimos elaborando. También creo que hubo una necesidad de llevar al video lo que pasa con el tema cuando lo tocamos. La idea de bailar desde lo que cada uno es, sin una forma estereotipada de la cumbia o lo que sea nos parecía buena, y también que el discurso fuera dicho por muchas personas, mujeres y hombres. Que no fuera solo un discurso que va desde la mujer sino que se ampliara. 
Luego Nico Soto integrante de la banda y realizador, maduro esas ideas, elaboró la propuesta inicial para el rodaje con una estética más definida. Se hizo el rodaje, de un modo muy espontáneo. La convocatoria fue abierta, si bien había un núcleo inicial de gente que sabíamos que iba a estar y ya en esas personas podíamos retratar la diversidad que queríamos, también estuvo el espacio a que llegara gente nueva que resonara con la propuesta. Fue un día de rodaje muy intenso y emotivo. Si bien habían actores y bailarines también fueron muchas personas sin experiencia en actuación y esa mezcla creo que le da un encanto particular. Luego tuvo un proceso largo de maduración en la edición y en la post producción, y fue Adrián Bentancor “Chito” quien lo finalizó.

 

Lucía Severino & Tránsito se presentan el domingo en la Sala Zavala Muniz. Toda la información del show aquí.