Uruguay al Primavera Sound. Primera Parte: La Llegada

Kristel Latecki

“¿Querés ir al Primavera Sound?”.

Con esa simple pero gigante pregunta comenzó un proyecto que terminó con unos 25 uruguayos instalándose cómodamente en el festival catalán, adueñándose de los escenarios y sorprendiendo a varios curiosos. Se trató de una avanzada que representó a los nuevos sonidos uruguayos, una que sin dudas abrirá diferentes e interesantes puertas para que nuestra música siga conquistando territorios.

Enmarcada dentro de los Proyectos Especiales de Ibermúsicas Uruguay, esta iniciativa liderada por María Laura Prigue (Coordinadora de Ibermúsicas) y Mariana Ripoll (Internacionalización del Área Música de la Dirección Nacional de Cultura) llevó a Barcelona a los cuatro artistas uruguayos seleccionados por el festival -Bonish, Eli Almic & DJ RC, F5 y Phoro-, además de algunos responsables de diferentes proyectos musicales y un pequeño equipo de producción, dentro del cual tuve el placer de participar como periodista, responsable de prensa y espectadora de primera fila de todo lo ocurrido.

Si el Primavera Sound es de por sí un festival de dimensiones inabarcables, con escenarios desperdigados dentro del inmenso Parc del Fórum, con artistas de primera línea coincidiendo en horario y obligando al público a tomar decisiones difíciles, sumarle a esto el Primavera Pro transforma su tránsito en una empresa titánica. De cualquier manera, aquí va un resumen en tres partes de una semana (más unos días de bonus) de debuts, acontecimientos, emociones y mucha música. 

Primera parte: la llegada uruguaya

El Primavera Sound no solo ocurre dentro de los límites del Parc del Fórum y sus 17 (!)  escenarios, sino que se expande hacia el resto de Barcelona con actividades en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB) y conciertos gratuitos que suceden antes, durante y después de los tres días centrales de shows.

En este sentido, el Primavera Pro es el mercado dentro del festival. Es una sección dedicada exclusivamente a la industria, donde participan representantes de todo el mundo, desde bookers, responsables de salas y mánagers a periodistas, músicos y productores. Es decir, toda la línea de producción de la fábrica musical. 

Además de ofrecer espacios para el intercambio, Mentoring Sessions y oportunidades de conocer colegas, tiene su propia agenda de shows que intenta capturar lo más efervescente de los diferentes países participantes. Es allí donde Uruguay tuvo su lugar de privilegio.

Con cuatro artistas seleccionados, la nuestra fue la segunda delegación extranjera más grande del Primavera Pro. Y gracias al volumen, la lejanía y la falta de información sobre el país, no hubo que hacer demasiado para llamar la atención. Pero desde ya adelanto: vaya que se hizo.

El arribo al CCCB -el centro de operaciones del Pro- el miércoles 29 se hizo como debía hacerse: en grupo. Luego de la acreditación y las obligatorias fotos, comenzó para todos la ajetreada agenda de reuniones, talleres y las Mentoring Sessions. Estas últimas, que portan un tanto intimidante nombre, se trataron de espacios dedicados para charlar durante 20 minutos con un experto de diferentes áreas de la música. Durante una hora, los participantes pudieron agendar mini reuniones con Mariana Ripoll de DNC, Rolo Borrazás de Pure Class Music, Mayra Jaimes de Senderos y quien escribe de PiiiLA. Allí, de forma distendida aunque estrictamente ordenada, se nos presentaron proyectos, intercambios de piques y se generaron interesantes contactos y vínculos para continuar profundizando y creando redes. 

Inmediatamente después, F5 ofreció en el hall del CCCB un taller de candombe titulado “Del tambor al ordenador”. De manera lúdica y con demostraciones, Lechuga Zafiro, Mathías, Guillermo y Wellington Silva explicaron cómo se realiza el toque del candombe y revelaron algunos trucos de la producción musical del grupo. Espontáneamente el público se animó a experimentar con los tambores y como debe ser, se armó un pequeño baile en la sala. 

Desde antes de partir hacia Barcelona, F5 estuvo llamando la atención gracias a su particular modernización del candombe, y este evento confirmó que para su debut en el escenario iban a pasar cosas.

Pero ese fue un sentimiento que también se vivió con el resto de los artistas. El Primavera Sound irguió como bandera el lema #TheNewNormal y presentó un colosal cartel equitativo: hubo una paridad real entre artistas masculinos y femeninos. Mientras en Uruguay siguen habiendo festivales donde no aparece ni una sola artista femenina, aquí se presentó con hechos cómo tiene que ser la actualidad musical. Y no solo en lo que tiene que ver con la mujer, sino también con los colectivos LGBTQ, en la diversidad de géneros musicales y sobre todo en lo urbano y bailable.

En este sentido, nuestra comitiva sin planearlo se plegó a esa nueva normalidad. Eli Almic y Phoro representaron la pata femenina de la música uruguaya y como tal capturaron la mayor atención de la prensa catalana, realizando varias notas previas y durante el festival, dentro de las cuales se destacaron la radio iCat y TV3. 

Más tarde, otro momento uruguayo dentro de la grilla de charlas del Pro lo tuvo Lechuga Zafiro al participar el jueves 30 de la ponencia “Identidad Musical: ¿Existe una música propia y una música ajena?”, junto a la periodista Aïda Camprubí, el músico Fermín Muguruza y le sociologue Iki Yos. Se trató de un interesantísimo intercambio sobre un tema tan intrincado como urgente como la apropiación cultural. Iki Yos, desde su perspectiva de inmigrante, no binaria y afro ofreció los argumentos más punzantes, mientras que Fermín Muguruza expuso su visión desde su experiencia como influencial músico perseguido políticamente. Lechuga, por su parte, explicó su rol en la creación de F5 -motivada por la intención de C1080 de llevar el candombe hacia el futuro-, y aportó su opinión como músico blanco de un país tercermundista que utiliza ritmos de culturas marginalizadas. “Es importante saber dónde estás parado”, dijo. “Es importante saber de dónde estás tomando las cosas, de dónde vienen. Entender su contexto y lo que está detrás”. Por eso, es parte de su misión musical ofrecer algo nuevo y diferente, aportar algo al género que sirve de inspiración.

Segunda parte: Uruguay debuta en los escenarios catalanes.