Kristel Latecki
Desde sus primeras canciones, Chita marcó la cancha con una propuesta de R&B y neo soul delicado, seductor y romántico. Compuestas inicialmente en Londres, se las llevó a Buenos Aires donde encontró un campo bastante libre para lucirse y hacer sonar cosas que por allí llegaban desde otras voces, sobre todo en inglés.
Chita, su primer EP editado en 2018 se enmarcaba más dentro del neo soul, pero fue No Fue, single que cuenta con un verso de Ca7riel, el track que definitivamente ofreció el R&B argentino que nadie sabía que necesitaba. Pero fiel a la ductilidad del género, que se emparenta tan bien con el pop, el hip hop y ritmos urbanos, Chita continuó explorando y proponiendo. Si en Encanto (2019), su primer LP con el hit Nada Más Que Hablar con Neo Pistea, cimentó su sonido y una pluma que se dedica a narrar lo bueno y lo malo del amor, la experimentación continuó en singles. Mentira (2019) trajo un poco de reggaetón que más adelante explotó en I Rili Don’t Care de nuevo con Ca7triel, Dándote con Cazzu y Lara91k (2020) y la más reciente Lo Que Hace Conmigo. Mientras que su seguidora Te Pasé a Buscar (2021) es una joyita del pop dosmilero.
Pero tras esta búsqueda, Chita está pronta para hacer el disco R&B que tanto esperó. De eso hablamos previo a su llegada a Montevideo, este viernes 29 de abril en La Trastienda, en lo que será su primer show posta, con banda completa y un repertorio que la refleja en sus diferentes facetas.
En tus comienzos, ¿cómo te sentías incursionando con un género que no era muy común en Argentina? ¿Sentías que te daba libertad no tener referentes inmediatos o preconceptos? ¿Podías crear tu propio camino?
Me encanta la pregunta. La verdad es que no lo tuve tan en cuenta, porque siempre –más allá de que no había tantos referentes argentinos– me basé más en lo que escuchaba afuera. Sí sentí durante mucho tiempo que lo que yo sacaba era una propuesta, y eso hacía que hubiera mucha gente que le encantó y mucha gente que no. Había una cosa dividida. Pero para mí se me dio muy natural, porque es una música que escucho desde que soy muy chiquita.
Yo siempre sentí libertad al respecto. Sentí una búsqueda, porque tampoco escuché tanto R&B en español. Pero al mismo tiempo estuve siempre muy segura porque es lo que me gusta y lo más fácil que me sale hacer. Y en realidad quizás la respuesta ambigua es más del lado del público que bueno, eso pasa siempre.
Si pensamos algo de R&B en español está por supuesto Emme.
Total. A Emme la tengo escuchadísima. De hecho ahora estamos haciendo un disco y ella lo está haciendo conmigo. Para mí hoy en día es una de mis mayores referentes del R&B en español. Es otra que lo tiene medio en la sangre.
Desde ese momento con Chita, tu primer EP, en adelante toda esta nueva generación urbana (por decirle de una manera) a pesar de la pandemia creció un montón. ¿Sentís que haya habido un gran cambio? ¿Hay una mejor recepción o un público ya consolidado?
100%. Desde que saqué el EP hasta ahora hay un abismo de diferencia. Hubo un resurgimiento de la industria argentina que empezó en 2017 más o menos, y desde ahí siento que el público argentino empezó a expandir sus horizontes. Veo mucha gente que me sigue que también le gustan artistas de afuera que me gustan y entienden más del género. Y aparte el R&B me doy cuenta que hoy en día está muy presente, en todo te diría. Poca gente lo hace puro pero está muy presente hasta en la música comercial. Así que definitivamente se ha abierto mucho el camino.
Supongo que también las colaboraciones han ayudado un montón para tender puentes. Hay mucha retroalimentación entre subgéneros. Pienso específicamente en tus canciones con Neo Pistea, Ca7triel y Cazzu.
Total. Y tambien me estoy acordando de que en estos últimos años pasaron también unas cosas bastante piolas para el género, que es que muchos artistas con mucha más visibilidad que yo sacaron discos. Como por ejemplo Cazzu con Una Niña Inútil que es un disco de R&B; Ca7riel también tiene muchísimas raíces en el género y hasta Tiago PKZ te diría que también saca un montón con tintes comerciales. Todo eso le da un montón de visibilidad e impulso, porque son artistas con mucha llegada.
Chita era un EP súper melancólico, pero después empezaron a aparecer diferentes canciones un poco más trap o arrimandote más hacia el reggaetón, ¿Sentís que la evolución de las letras hayan acompañado lo rítmico y pasar a algo más entre empoderado y más diversión? No quiero decir que se hayan alivianado porque también hay un montón. ¿Sentís que al menos haya un cambio temático?
(Risas) Igual me encanta la palabra “alivianada”, la verdad que la voy a agarrar. Yo siempre cuento que mi primer EP lo saque cuando era muy chica y después seguí sacando música. Siento que como todos los artistas en general estoy en una búsqueda, y eso se puede ver en mi evolución musical. Sí es una realidad que a veces escucho las primeras canciones que saque y digo: “wow, qué solemne que estaba acá”. No sabía tanto de composición, escribía lo que me salía y siento que era más formal. Y sí, no te voy a mentir que cuando fui creciendo y buscando otras cosas decidí probar algo más liviano, porque también cuando empezás a coquetear con la música urbana, cuando te ponés a hacer un reggaetón es raro hacerlo con una letra muy profunda. Es más para bailar, así que si definitivamente hubo una cosa más liviana (Risas).
Por ejemplo está Lo Que Hace Conmigo que tiene esa base pero se pone profundo, se pone a cuestionar.
Sí, esa me quedo medio híbrida. Es un reggaetón pero estoy bajando línea (Risas).
¿En ese sentido le pusiste de vos? ¿Estuviste en ese lugar medio complicado de los celos?
Sí, 100%. Siempre cuento que sí, no voy a mentir. La hicimos con Cazzu porque le estaba contando que me había agarrado de las patas unos celos. Y obviamente, lo que dice la canción es una parodia y fue buscado de es una manera. Hay cosas que se están llevando al extremo a propósito, pero fue una especie de catarsis y me sentí muy bien. Realmente fue muy liberador hacerlo. Y cuando salió hubo un montón de gente que le gustó y otra que decía: «no, estás atrasando». Y yo en realidad no hice la canción como para eso o para decir que sentir celos es cool, fue más que nada una catarsis. Yo entiendo que no todo el mundo es celoso pero para la gente que sí lo siente fue como una ayudita (Risas).
Si hay que decir algo, en todo caso es bastante crítica. Pone el foco en algo que está de menos y se reconoce de esa forma.
Exacto. Aparte cuando le conté las cosas a Cazzu me sentí muy aliviada, porque sentía que no lo podía decir tanto porque en el mundo de hoy en día está como mal visto, ¿viste? Porque ahora están las relaciones abiertas, el poliamor y todo eso, que lo entiendo pero ya nadie habla de los celos, que no deja de ser un sentimiento mundano, que le pasa a todo el mundo. Te puede pasar con un novio como con una amiga, o lo que sea. Entonces, cuando empezamos a escribirla quise dejarla escrita en el día, porque no soy partidaria de que con toda la modernidad de hoy en día de repente uno pierda la capacidad de hablar de cosas que sentimos. Y viste que cuando no hablás de algo, te la guardás y es horrible, por eso me parecía importante mostrar eso, el otro lado. Con un poco de honestidad.
Y bueno, como decías mucha gente se sintió identificada y otra que no.
Tuve de todo. Mucha gente que la entendió y se sentía entendida. Pero después estaba la gente diciéndome que le parecía que atrasaba. Recibí un poco de hate desde ese lado porque lo veían como algo tóxico. Y puedo empatizar con eso porque entiendo que lo estoy llevando al extremo y en momentos tengo barras que son bastante polémicas, como por ejemplo “Yo quiero ser tu presente y pasado”. ¡Pero es una parodia!
En varias entrevistas has comentado que sos bastante tímida y volcar lo que es tu mundo sentimental te ha costado. ¿Cómo lo sentís ahora? ¿Sentís que lo fuiste trabajando a medida que hacías canciones?
Así como decís. Lo fui laburando un montón. Honestamente, nunca terminé de entender si la palabra era “timidez” pero al principio era muy … era más nueva en todo esto, y me importaba más lo que dijeran, entonces iba más con cuidado. Pero con el tiempo una se va plantando más, vas aprendiendo más cosas y vas encontrando más libertad. Definitivamente eso cambió, ahora siento las cosas diferente a la hora de componer y arriba del escenario.
¿En qué anda ese disco que contaste antes?
Estoy muy contenta con el disco, tengo muchas ganas de que lo escuchen porque es un R&B puro. Lo estamos buscando hace tiempo y dimos con algo que me tiene muy entusiasmada, siento que es un sonido nuevo. Ahora dentro de poquito sale el primer corte y estamos ahí puliendo los detalles. Estoy muy contenta porque es EL disco de R&B que tenía ganas de sacar hace muchísimo tiempo.
Esta vez estoy trabajando con Emme, estamos componiendo juntas y con su productor que es Benja López Barrios. Ellos son equipo hace bastante tiempo y la verdad es que es un placer este proceso. Los elegí a ellos porque realmente vienen de ese mundo R&B más que cualquier productor de Buenos Aires. Entienden el género como nadie así, que estamos haciendo algo muy de pura cepa.
¿Que va a pasar en este próximo show? Hace pila que no venís, así que es un acontecimiento casi.
¡Olvidate! Cuando anuncié el show puse que es la primera vez que voy porque lo siento así. Había mucha gente que me comentaba: «no, vos ya viniste», que obvio me acuerdo, pero cuando fui fue un show muy cortito en el marco de un festival, y este es mi show. Vamos a hacer un repaso por todas mis canciones, las nuevas y las viejas. Llevo toda mi banda y mi show, por eso va a ser casi la primera vez que nos encontremos.
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